17.4.11

Self





¿Y ahora qué? ¿No eras tú la que presumía de orgullo? Mírate… ¿Qué piensas hacer? ¿Seguirás fingiendo que toda esa superficial coraza que te embarga es más fuerte que tú? Cuando está completamente destrozada. Se ha convertido en un puzzle, y mientras pierdes el tiempo en encajar todas las piezas, no quieres darte cuenta de que lo que importa no es tu escudo, sino ese órgano que tanto odias. El miedo te embarga por completo, te enterraste bajo tierra y pensaste que nada ni nadie podrían hacerte salir… Que equivocada estabas eh. Cuando quisiste fluir de repente,  quisiste lanzarte al primer contacto de piel que hiciera que tu vello se pusiera de punta y tu corazón despertara y latiera tan fuerte que se te saliera del pecho. ¿Pero sabes que pasó? Que cuando lo conseguiste, te asustaste. Tus piernas temblaban y se te encogía el estómago. ¿Es esto normal? (me preguntabas). Cuántas veces he tenido que explicarte que yo soy tú y tú eres yo. Y que sé tanto como tú sobre él, que no sé hasta dónde llegarían sus ojos por buscar tus pupilas, ni sé cuantos vasos podría llenar con sus lágrimas.
¿Sabes lo que va a pasar ahora? Vas a temer otra vez, y estoy segura de que no dejarás a nadie, (ni aún que yo te convenciese) entrar en ti.  
Y no hagas como que no te afecta, porque ahora mismo sé que te estás deteriorando, y es eso lo que más te jode. ¿Qué pasa? No te gusta lo que escuchas, ¿verdad?
Venga pequeña… no te subleves, no desaparezcas, formo parte de ti, como tú de mi.
¡Espera!
Ya está…lárgate, finge no escucharme, golpéame contra tu muro de indiferencia.
Pero estoy aquí.
Buenas noches Princesa.

1 comentario:

  1. Todos tenemos miedo cuando queremos a alguien...
    y es que si no sufriéramos, no seríamos capaces después de identificar el placer :)

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